Desafortunadamente, en nuestra querida industria, a menudo nos encontramos con "pseudocientíficos" que hacen afirmaciones que no se basan en la metodología científica, sino en la "mitología del café" (si tal cosa existe), o en ideas que son más una fabricación de la industria, que estudios científicos serios sobre un tema determinado.
Tomemos el concepto de un perfil de taza por un minuto, ¿cómo alguien podría asegurar cuál es el perfil de taza de un origen dado?
Tener 10 parámetros diferentes de evaluación, para todo un país productor, que por cierto, tiene diferentes regiones, climas, suelos, terroirs, variedades, métodos de procesamiento, etc. ¿Cómo podría alguien decir que el perfil de taza de Kenia tiene notas de grosella negra, fresa madura, acidez vinosa y cuerpo aterciopelado? Ese puede ser el lote que cataste una vez o tal vez dos veces (un café con ese perfil es memorable y, lamentablemente, no se encuentra muy a menudo).
El perfil de taza de un determinado lote depende de tantos factores que es imposible controlar su consistencia. Lo que hacen los productores es tratar de minimizar las posibilidades de error o desastre, pero aún así existe el riesgo y todo se puede ir al carajo. Murphy siempre está presente, como en cualquier otro sistema productivo, la entropía siempre aumenta con el tiempo y sin embargo nos esforzamos por mantener la calidad alta, pero el resultado final siempre es incierto.
Mi invitación aquí es a catar cafés con la mente abierta. Dejemos de tratar de encontrar ideas preconcebidas sobre cómo debería ser una taza de café de Kenia. El café es mucho más complicado que una doble fermentación (que, por cierto, todavía no controlamos por completo y ni siquiera entendemos), y depende de muchos otros factores que también influyen en el sabor, que pueden hacer que tu taza de Kenia sea delicada, floral, chocolatada, especiada, afrutada y también con un sabor increíble, como esa taza con notas de grosella negra y una acidez vinosa intensa, que no recuerdas si realmente lo tomaste o solo fue un buen sueño.
¡Abre tu mente a nuevas posibilidades, elimina viejas fabricaciones mentales y disfruta tu café de Kenia!