Si sabemos que el punto máximo de calidad de un lote es directamente proporcional a lo madura que está la cereza en el momento de la cosecha, es irrisorio pensar que se puede acortar el largo camino de la calidad a través de la fermentación. ¿Dónde queda la trazabilidad si ponemos diferentes variedades de frutas y levaduras en el tanque de fermentación? Dónde está la transparencia si estamos cobrando precios altísimos por lotes mal cosechados? Y dónde queda la sustentabilidad si basamos la rentabilidad financiera de la industria en un modelo del que solo se benefician unos pocos?
Redirige el rumbo de la industria a través de tus decisiones de compra y disfruta tu café!