A finales del siglo XVII, los cafés se expandieron por toda Europa y los holandeses, ingleses y franceses empezaron a importar café de diferentes puertos árabes. Los árabes habían prohibido el comercio de café en granos o plantas fértiles, por supuesto, querían mantener su monopolio. Pero cuando el café llegó a ser muy popular en Europa alrededor de 1690, y los problemas políticos en los países árabes amenazaron las importaciones de café, varios países europeos intentaron obtener plantas o semillas de café con fines comerciales.
Las plantas de café se introdujeron en Batavia (hoy Yakarta) Indonesia en 1696. En 1711 las primeras exportaciones de café fueron enviadas de Java a Europa. El primer embarque de café fue de 450 kg. Y diez años más tarde, la exportación ya había alcanzado los 60.000 kg.
Originalmente el café se cultivaba sólo en Java, pero en 1870, los holandeses expandieron las áreas de cultivo de café a Sumatra, Bali, Sulawesi y Timor. En el norte de Sumatra, el café se cultivó por primera vez cerca del lago Toba en 1888; y luego en las Montañas de Gayo, cerca del lago Tawar, hacia 1924.